Me cuentan que la secretaria de Transporte del gobierno de Puebla, Elsa Bracamonte, le ha renunciado en dos ocasiones al gobernador Miguel Barbosa.

La funcionaria justifica que es mucha la corrupción que hay en la dependencia y no puede de plano con ella.

El mandatario poblano le ha pedido que aguante y le ha ofrecido todo su respaldo, pero la funcionaria en varias ocasiones ha entrado en crisis al grado de confesar que es una de las peores pesadillas que le ha tocado vivir.

El transporte ha sido una verdadera pesadilla para todos los ex gobernadores y hoy más para Miguel Barbosa porque Alberto Vivas le dejó un enjambre de corrupción.

Ni siquiera sus amigos, Yassir Vázquez ó Guillermo Aréchiga, honraron la confianza que les entregó. Ambos llegaron a robar, literalmente como muchos lo hacen en este gobierno hasta que son descubiertos.

PD. De muy buena fuente, me cuentan que Ardelio Vargas le renunció a Barbosa porque éste le quiso gritar.

Mi reconocimiento a Ardelio Vargas por ser de los pocos, muy pocos que le han dejado aventado el trabajo a Barbosa antes de perder la dignidad.