El derbi sevillano salta a la palestra en la quinta jornada de la Liga. El feudo nervionense presenciará la primera batalla entre los dos técnicos sudamericanos, que vivirán por primera vez el duelo de máxima rivalidad de la capital hispalense. El equipo rojiblanco es el claro vencedor de los 45 derbis disputados en el estadio sevillista en primera división, con un balance de 28 victorias, seis empates y once derrotas.
Además, el Sevilla de Jorge Sampaoli llega al derbi con la moral por las nubes después de realizar un gran inicio de temporada tanto en la Liga como en la UEFA Champions League, donde consiguió en la primera jornada un valioso empate ante la Juventus. El equipo sevillista ha renovado parte de su plantilla, ya que en el mercado estival jugadores de gran peso en el vestuario como Kevin Gameiro, Éver Banega y Grzegorz Krychowiak abandonaron el club junto a Unai Emery, el entrenador que llevó a la gloria al sevillismo ganando tres UEFA Europa League consecutivas.
Pero el director deportivo, Ramón Rodríguez 'Monchi', ha sabido moverse en el mercado una vez más para formar un equipo competitivo que este año ha regresado a la Champions por segunda campaña consecutiva. Franco 'El Mudo' Vázquez, Luciano Vietto e Hiroshi Kiyotake son algunas de las caras nuevas de un proyecto que quiere marcar la diferencia dentro del terreno de juego. Por su parte, el técnico argentino se guardará un as bajo la manga hasta última hora sobre el sistema que saltará al Pizjúan, ya que en estos primeros compases ha alternado el 3-5-2 con el 4-1-4-1. De esta manera, el Sevilla buscará que su estadio sea un fortín para llevarse el primer derbi de la temporada.
Por su parte, el Real Betis aterriza en el Pizjuán con una plantilla totalmente renovada y con el objetivo de espantar los viejos fantasmas de la pasada temporada. En los cuatro derbis vividos durante la anterior campaña, el equipo sevillista consiguió apear al conjunto bético de la Copa del Rey tras imponerse por un resultado global de 6-0, y en Liga se impusieron en Nervión por 2-0 y sacaron un empate sin goles en el Estadio Benito Villamarín.
El equipo verdiblanco finalizó el pasado curso en la décima posición después de una temporada con muchos altibajos. Para esta temporada ha realizado una importante renovación de su plantilla, a la que han llegado once caras nuevas y han dicho adiós hasta 14 jugadores. Futbolistas como Riza Durmisi, Aïssa Mandi y Felipe Gutiérrez, entre otros, vivirán su primer derbi. El equipo de Gustavo Poyet quiere cambiar la dinámica negativa de estos encuentros ante su eterno rival y para ello intentará poner en práctica el sistema táctico utilizado en las primeras jornadas, un 4-3-3.
Al técnico uruguayo le gusta llevar la manija del partido y en esta ocasión puede darle la batuta del juego al canterano Dani Ceballos (hasta ahora con poca participación), que acompañaría en la sala de máquinas a Petros y Felipe Gutiérrez. Arriba estará el indiscutible Rubén Castro. El ariete canario comparte la posición de máximo goleador de la Liga junto a Lionel Messi, Antoine Griezmann y Luis Suárez, tras marcar por partida doble ante Barça y Valencia.
A escasas horas para que el balón eche a rodar sobre el tapiz del Pizjúan, el derbi ya ha comenzado en los barrios de Heliópolis y de Nervión. Hasta hace diez años ambos equipos estaban casi en igualdad de títulos, pero en la última década el Sevilla ha llenado sus vitrinas de trofeos, convirtiéndose en el rey de la ciudad. Los días previos al partido, la capital andaluza se divide en dos bandos que se aferran a este ansiado duelo para vengarse de su eterno rival. Ambas aficiones cuentan las horas para que dé comienzo la batalla por el honor de esta importante victoria. Poyet y Sampaoli se juegan parte de su crédito en el primer derbi sevillano del curso, mucho más que un simple partido.
