Después de haber sido suspendido por cuatro meses, el jugador del Bayer Leverkusen, Hakan Calhanoglu, está seguro de que ya no quiere causar más problemas a su club, por lo que ofreció quedarse sin salario durante el tiempo que esté sin jugar.
La FIFA sancionó al jugador turco por incumplimiento de contrato con el equipo turco Trabzonspor en el 2011, por lo que además de excluirlo de las canchas, le ordenó pagar 100 mil euros.
"Bayer no tiene nada que ver con el incidente de ese momento. El club fue duramente golpeado por el castigo en un sentido deportivo y económico... Por eso es obvio para mí no dañar más al club durante el tiempo de mi exclusión, y voy a renunciar a mi sueldo", explicó Hakan luego de que se diera a conocer la suspensión.
Calhanoglu aceptó su responsabilidad y al considerar que su actual club no tiene la culpa de lo que sucedió en el 2011, está buscando la manera de no afectarlo más por el castigo que le impuso la FIFA. Aun así, el turco continuará entrenando con el Bayer durante el tiempo que dure su sanción para mantenerse en forma.