Justin Bieber ha tratado de dejar los escándalos de lado, y ahora además de cantar le gusta mucho ir a la iglesia, lo que demuestra que cada vez es un mejor cristiano.
El cantante trata de cumplir con las obligaciones de los feligreses, y aunque ande viajando, siempre encuentra la oportunidad de asistir a un templo del Movimiento Pentecostal Hillsong, iglesia a la que pertenece.
En sus recientes visitas a Australia, no dejó pasar ni un domingo sin asistir a los oficios, según reveló el pastor Carl Lentz, máxima autoridad de esa iglesia en ese país: “No es cierto que le pagamos para que venga; él lo hace porque quiere, y eso nos enseña que Justin es ante todo un buen cristiano. No creo que haya olvidado sus problemas, pero todos tenemos que salir adelante con nuestros errores. Cada día que pasa va creciendo como persona, recibe más lecciones, aprende y es más grande su sabiduría”, dijo el pastor en el programa de televisión “Rise”.
Según Lentz Justin no hace gala de protagonismo en los oficios, no llama la atención y sólo asiste como cualquier otro feligrés.