Tras el trágico derrame de unas 21,000 toneladas de diésel en el Círculo Polar Ártico, el pasado viernes, Greenpeace alertó del daño ambiental, mientras que el ministro ruso de Recursos Naturales y Ecología, Dmitry Kobylkin, afirmó que las empresas deberían hacer un inventario de la infraestructura industrial existente en la zona.
“Es necesario acelerar la aprobación de un proyecto de ley destinado a prevenir y eliminar los derrames de petróleo y los productos derivados”.
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De acuerdo con la organización ecologista Greenpeace, que citó a las autoridades, “Norilsk está contaminado decenas de miles de veces por encima de la norma”.
“El agua está contaminada por 20 kilómetros, el grosor de la capa de productos derivados del petróleo es de hasta 20 centímetros y podría ser una consecuencia grave para la empresa responsable del accidente: MMC Norilsk Nickel”, aseguró.
Aseguró que todas las compañías petroleras deben aprobar un plan para la prevención y liquidación de derrames y productos derivados del petróleo, además de contar con el apoyo financiero suficiente para enfrentar accidentes, esto respaldado por el acuerdo con el proyecto de ley.
Evgueni Zínichev, ministro de Situaciones de Emergencia de Rusia, decretó estado de emergencia, tras reunión virtual Vladimir Putin, mandatario de Rusia donde se discutió las medidas frente al accidente registrado el pasado viernes en una central termoeléctrica de Norilsk, en el Círculo Polar ártico.
Con información de Forbes.
