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A través de un canal de Telegram, Kozak expresó su deseo de llevar a cabo un tiroteo escolar seguido de su suicidio, inspirándose en la masacre cometida por Alina Afanaskina en la escuela de Bryansk en Rusia el pasado 7 de diciembre.

Siempre quise matar, pensé que podría convertirme en un maníaco en el futuro. Luego, cuando Ilnaz (Galyaviev) – autor del tiroteo Gymnasium de Kazán en 2021- hizo el tiroteo, me di cuenta que era mucho más rentable hacer asesinatos en masa que seriales.

En sus mensajes, mencionó haber esperado el momento adecuado, siendo Alina Afanaskina el catalizador de sus acciones.

Me senté, esperé, soñé, quise, pero Alina se convirtió en el último punto. Fue como ella vino a mí desde el cielo justo a tiempo”, redactó Kozak.

El tirador anunció la clausura temporal de su canal, que consideraba un diario de su vida previa al tiroteo, pero advirtió su regreso unas horas antes de ejecutar su plan.

Este canal es un diario donde hablo acerca de mi vida antes del tiroteo”, aseguró.

Filtraciones en redes sociales revelaron conversaciones los días 12, 13, 17 y 19 de diciembre donde Kozak insinuaba la matanza futura.

Miedo en la Unión Europea

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, expresó estar “espantada” por el tiroteo, extendiendo sus condolencias a las familias de las víctimas y al pueblo checo en su conjunto.

Por su parte, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, se declaró profundamente horrorizada por el ataque en la Universidad Carolina.

Las autoridades checas investigan los indicios previos en las redes sociales y trabajan para comprender las motivaciones detrás de este trágico suceso.

La tragedia ha generado conmoción a nivel local e internacional, renovando el debate sobre la seguridad en entornos educativos y la detección temprana de posibles amenazas.