Me cuentan que los más de 80 mapaches electorales considerados como un ejército en el morenogalismo, rechazan ser rescatados por el ex secretario general de gobierno Fernando Manzanilla Prieto y el morenovallista Eukid Castañón Herrera.
Y es que a Manzanilla lo ven como una persona soberbia, insensible, déspota, desinteresado y que no tiene posibilidades para competir en un cargo de elección popular en el 2021 en el 2024.
Los mapaches electorales consideran que cuando Fernando Manzanilla tiene poder es soberbio, y cuando lo pierde, finge ser la persona más sencilla.
En contraparte, Eukid Castañón representa los mismos vicios y abusos que se toleraron durante ocho años del morenogalismo, y no quieren verse involucrados en delitos electorales que han sido tipificados desde las 4T.
También lo ven soberbio, enloquecido, agresivo e insensible, por lo que piden no seguir trabajando para la delincuencia electoral que representa.
Los mapaches electorales aseguran que Eukid Castañón se quedaba con grandes cantidades de dinero que los gobiernos panistas le entregaban para la operación electoral.
Incluso aseguran que los apretaban en viáticos, hoteles y hasta combustible que tenían que pagar para poder cumplir la operación electoral que en su momento les era encomendada.
Así pues, es como Manzanilla y Eukid se han ganado la mala fama por el poder político que los embriaga.