Si conoce la prudencia y tiene alta moral, el Consejero Jurídico del gobierno de Puebla, Ricardo Velázquez Cruz, debe solicitar permiso temporal a su cargo mientras se llevan a cabo las investigaciones en contra del ex gobernador Mario Marín Torres, capturado por el delito de tortura en contra de la periodista y escritora Lydia Cacho Rivero.
Ricardo Velázquez fue quien encabezó la defensa legal del corrupto ex mandatario poblano y cuentan que lo veían muy seguido por la sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Como funcionario del gobierno de Puebla, Ricardo Velázquez tiene la obligación de honrar la confianza que le ha depositado el mandatario Miguel Barbosa.
Tiene también la obligación de no incurrir en un conflicto de interés, porque encabezó la defensa legal del corrupto ex gobernador y hoy tendría que aportar pruebas en su contra. Podría convertirse en el defensor y verdugo de Marín.
Como ex defensor de Marín, Ricardo Velázquez conoció perfectamente toda la estrategia que se hizo para defender al hoy preso. Y cuentan que fue inmoral el derroche de dinero de procedencia desconocida que se usó para lavarle la cara al hoy preso.
¿Estará dispuesto Ricardo Velázquez a aportar pruebas para investigar a los prestanombres de Mario Marín, muchos de ellos amigos y conocidos suyos?.
¿Estará dispuesto a aportar elementos para que se inicien nuevas carpetas de investigación en contra de los marinistas?.
Lo que decida Ricardo Velázquez es válido, pero por lo menos debe evitar especulaciones para no perjudicar a su jefe, el mandatario Barbosa, a quien nadie le puede regatear su lucha contra la corrupción y la delincuencia.
Y Mario Marín y varios de sus ex colaboradores son delincuentes.
